Justo detrás del municipio de Franz Josef, ubicado entre los majestuosos Alpes del Sur, se encuentra el poderoso Glaciar Franz Josef. Este enorme río de hielo siempre está presente. Ya sea en retirada o en avance, la Madre Naturaleza siempre está trabajando.
Aunque nunca tiene prisa (el glaciar se mueve alrededor de 50 cm al día), el glaciar Franz Josef siempre está en movimiento, ya que fluye desde 3,000 m hasta solo 240 metros sobre el nivel del mar.
Los glaciólogos hacen un estudio para explicar cómo surgió el glaciar y por qué se retira y avanza. Se trata de acumulación, ablación, tiempo de respuesta y edades de hielo anteriores.
Pero para Ngai Tahu, la iwi (tribu) maorí local de Westland, hay una manera mucho mejor de explicar esta increíble formación entre las montañas.
Y tiene que ver con un corazón roto
Kā Roimata o Hinehukatere (Las lágrimas heladas de Hinehukatere)
La historia maorí del Glaciar Francisco José trata sobre Hinehukatere, una chica extremadamente fuerte y valiente a la que le encantaba escalar en las montañas.
Un día persuadió a su amante, Wawe, para que escalara con ella. Wawe tenía menos experiencia en las montañas, pero siguió subiendo para poder estar con su amada.
Se produjo un desastre cuando una avalancha arrastró a Wawe por la montaña hasta su muerte. Hinehukatere estaba desconsolado. Después de su muerte, su corazón se rompió y sus lágrimas fluyeron por la ladera de la montaña. Los dioses congelaron sus lágrimas de aroha (amor) en la forma del glaciar como un recordatorio de su dolor.
Y así el glaciar llegó a tener su nombre, Kā Roimata o Hinehukatere – Las Lágrimas Heladas de Hinehukatere.
De una trágica historia de amor, el glaciar Franz Josef se ha convertido en uno de los destinos turísticos más populares de Nueva Zelanda.
Cuando visite el País de los Glaciares, asegúrese de dar un paseo por el fondo del valle del glaciar Franz Josef junto al río Waiho. El río Waiho fluye directamente desde el glaciar y son las lágrimas de corazón roto de Hinehukatere, que aún fluyen por su amor perdido.