Generalmente se necesitan años de trabajo en la industria para poder convertirse en editora de belleza. Los editores de belleza suelen trabajar para revistas femeninas o de moda, evaluando nuevos productos, escribiendo reseñas y editando historias enviadas por otros escritores del departamento de belleza. En primer lugar, para convertirse en editora de belleza, casi siempre es necesario obtener una licenciatura en periodismo, comunicaciones o inglés.
Nunca es demasiado pronto para comenzar a acumular experiencia, por lo que alguien que quiera convertirse en editor de belleza algún día debería trabajar en una publicación universitaria o incluso en un periódico comunitario. Nunca se sabe quién podría querer reseñas de productos de belleza o un artículo sobre las últimas tendencias. Todos estos clips pueden ayudarlo una vez que tenga su título universitario y comience a solicitar empleos.
Es prácticamente imposible conseguir un trabajo como editor al terminar la universidad. En su lugar, tendrá que trabajar para llegar a ser un editor de belleza. Esto podría significar escribir por cuenta propia para revistas o periódicos, o podría significar un puesto de personal de nivel de entrada en una revista. Muchos editores de belleza exitosos comenzaron como editores de texto, editores de líneas o verificadores de datos, solo por nombrar algunos. A otros se les puede pedir que prueben algunos de los productos recibidos por la revista, como productos para el cuidado de las uñas, productos para el cuidado facial, cuidado del cabello o cosméticos, entre otros.
El éxito en un trabajo de nivel inicial lo hará más notable para un ascenso. Muchas revistas prefieren contratar desde dentro, y es posible que pronto pueda ascender a un puesto editorial o incluso a un puesto de editor senior. Mientras intentas convertirte en editor de belleza, es importante leer constantemente las revistas de moda y belleza de la competencia, además de aquella para la que trabajas, así como mantenerte al tanto de las últimas tendencias. Puede ser útil mirar alrededor de su área para localizar nuevas boutiques o negocios, que podrían ser relevantes para una historia, y presentar ideas de historias a su editor.
Cualquier persona que quiera convertirse en editora de belleza debe ser inteligente y creativa, pensando constantemente en nuevas ideas de historias y nuevos ángulos desde los que abordar un producto. La persistencia, la paciencia y la entrega constante de trabajo de calidad lo pondrán en primer lugar si se abre un puesto de editor de belleza. Los editores de belleza de grandes revistas pueden recibir docenas o incluso cientos de productos al día para revisar, y es necesario no solo poder hacer su propio trabajo de forma rápida y precisa, sino también tener la capacidad de trabajar con otros escritores y editores, y ofrecerles comentarios constructivos sobre su trabajo.